El sueño…
el sueño es el hermano de la muerte.
Así que túmbate bajo este esqueleto en la frialdad de la tumba.
Permite que el abrazo de sus muertos brazos
te mantenga totalmente a salvo y dormido.
Enterrado en un sueño…
silenciosamente….
Para siempre bajo tierra




La Nausea - J.P. Sartre



La Náusea
J.P. Sartre








“Lo esencial es la contingencia. Quiero decir que, por definición, la existencia no es la necesidad Existir es estar ahí, simplemente; los existentes aparecen, se dejan encontrar, pero nunca es posible deducirlos. Creo que hay quienes han comprendido esto. Sólo que han intentado superar esta contingencia inventando un ser necesario y causa de sí. Pero ningún ser necesario puede explicar la existencia: la contingencia no es una máscara, una apariencia que puede disiparse; es lo absoluto, en consecuencia, la gratuidad perfecta. Todo es gratuito: ese jardín, esta ciudad, yo mismo. Cuando uno llega a comprenderlo, se le revuelve el estómago y todo empieza a flotar... eso es la Náusea” (“La Náusea”).


La náusea aparece al sentir el carácter absurdo de la existencia, al captar la realidad como algo superfluo, contingente; los existentes (nosotros incluidos) venimos de la nada, existimos sin justificación alguna y terminaremos en la nada. Hemos sido arrojados a la existencia, y del mismo modo seremos arrojados a la muerte. “Todo lo que existe nace sin razón, se prolonga por debilidad y muere por casualidad.”









Canción de Hielo y Fuego (Game Of Throne) - George R R Martin




Canción de Hielo y Fuego (Game Of Throne)
George R. R. Martin





Concebida originalmente en cuatro volúmenes, la saga vio pronto aumentada su longitud a seis tomos.
Esta saga es la mejor y más impresionante obra de fantasía mitológica que se haya escrito después de Tolkien. Se llama Canción de Hielo y Fuego, aunque es más conocida por la miniserie Juego de Tronos, que es su primer libro.
Aún falta el último libro The Winds of Winter, que tengo entendido aún no esta traducido.(Aquí les dejo los 5 primeros)







1. JUEGO DE TRONOS
Tras el largo verano, el invierno se acerca a los Siete Reinos. Lord Eddars Stark, señor de Invernalia, deja sus dominios para unirse a la corte del rey Robert Baratheon el Usurpador, hombre díscolo y otrora guerrero audaz cuyas mayores aficiones son comer, beber y engendrar bastardos. Eddard Stark desempeñará el cargo de Mano del Rey e intentará desentrañar una maraña de intrigas que pondrá en peligro su vida... y la de los suyos.
En un mundo cuyas estaciones duran décadas y en el que retazos de una magia inmemorial y olvidada surgen en los rincones más sombrios y maravillosos, la traición y la lealtad, la compasión y la sed de venganza, el amor y el poder hacen del juego de tronos una poderosa trampa que atrapa en sus fauces a los personajes.

2. CHOQUE DE REYES
Un cometa del color de la sangre hiende el cielo, cargado de malos augurios. Y hay razones sobradas para pensar así: los Siete Reinos se ven sacudidos por las luchas intestinas entre los nobles por la sucesión al Trono de Hierro. En la otra orilla del mar Angosto, la princesa Daenerys Targaryen conduce a su pueblo de jinetes salvajes a través del desierto. Y en los páramos helados del norte, más allá del Muro, un ejército implacable avanza hacia un territorio asolado por el caos y las guerras fratricidas.
Nos vuelve testigos de luchas fratricidas, intrigas y traiciones palaciegas en una tierra maldita por la guerra, donde fuerzas ocultas se alzan de nuevo y acechan para reinar en las noches del largo invierno que se avecina.

3. TORMENTA DE ESPADAS
Las huestes de los fugaces reyes de Poniente, descompuestas en hordas, asuelan y esquilman una tierra castigada por la guerra e indefensa ante un invierno que se anuncia inusitadamente crudo. Las alianzas nacen y se desvanecen como volutas de humo bajo el viento helado del Norte. Ajena a las intrigas palaciegas, e ignorante del auténtico peligro en ciernes, la Guardia de la Noche se ve desbordada por los salvajes. Y al otro lado del mundo, Daenerys Targaryen intenta reclutar en las Ciudades Libres un ejército con el que desembarcar en su tierra. Martin hace que lo imposible parezca sencillo.

4. FESTIN DE CUERVOS
Mientras los vientos del otoño desnudan los árboles, las últimas cosechas se pudren en los pocos campos que no han sido devastados por la guerra, y por los ríos teñidos de rojo bajan cadáveres de todos los blasones y estirpes. Y aunque casi todo Poniente yace extenuado, en diversos rincones florecen nuevas e inquietantes intrigas que ansían nutrirse de los despojos de un reino moribundo.

5-DANZA CON DRAGONES
Esta es una traducción libre realizado por varios fans de Canción de Hielo y Fuego del volumen quinto de la saga. Este volumen no sigue al anterior en el sentido
tradicional, mas bien correr a la par con él. Ambos, Danza y Festín, retoman la historia inmediatamente después de los acontecimientos del tercer volumen de la serie, Una Tormenta de Espadas. Mientras que la Festín se centró en los acontecimientos en y alrededor de Desembarco del Rey, en las Islas de Hierro, y abajo en Dorne, Danza nos lleva al norte, al Castillo Negro y el muro (y más allá), y a través del mar angosto a Pentos y la Bahía de Esclavos, para retomar los relatos de Tyrion Lannister, Jon nieve, Daenerys Targaryen, y todos los otros personajes que no vemos en el volumen anterior. En lugar de ser secuencial, los dos libros son paralelos ... divididos geográficamente, en lugar de cronológicamente.
Pero sólo hasta cierto punto.








20 Poemas para ser leídos en el tranvía - Oliverio Girondo



20 Poemas para ser leídos en el tranvía

Oliverio Girondo









[...]Se pueden leer en la poesía de Girondo tres momentos fundamentales. Como verdadera ópera prima, los Veinte poemas... inauguran una poesía vital, llena de un entusiasmo celebratorio que parece responder al imperativo de la vanguardia de unir arte y vida. Muchos de sus poemas podrían funcionar como un manifiesto futurista, a partir de su desprecio por los valores consagrados y de su irreverencia religiosa. Pero hay algo más: a partir de esta poética de lo provisorio y de un uso ajustado del montaje cubista, se desmantela la linealidad cronológica de los cuadernos de viaje a favor de una lírica urbana que ubica la ciudad como centro.

El cosmopolitismo, la carnavalización de la que habla Jorge Schwartz en sus estudios críticos, permiten que el turista burlón salte de Bretaña a Brest, de Venecia a Buenos Aires o Sevilla y pueda maravillarse por las chicas de Flores, que "tienen los ojos dulces, como las almendras azucaradas de la Confitería del Molino y usan moños de seda que les liban las nalgas con un aleteo de mariposa". La centralidad del elemento visual (muy importante tanto en las preocupaciones teóricas de Girondo como en la integración del dibujo en los procesos de composición) se combina con una poética de lo provisorio donde parece cumplirse el mandato del epígrafe del libro: "Ningún prejuicio más ridículo que el prejuicio de lo sublime". De esta manera, la humanización de los objetos y la novísima centralidad que se le otorga a lo urbano, ya sean sus calles, los medios de transporte, los espacios públicos, los cafés y las milongas, permiten articular una estética profundamente antirromántica e innovadora.




imágen: O.Girondo por Ricardo Ajler

La Rebelión de los Ángeles - Anatole France



La Rebelión de los Ángeles
Anatole France






La Rebelión de losÁngeles, novela crítica, paródica y desternillante con la que Anatole France desmitifica la camarilla celeste y deja a Dios, o el cargo de Dios, como el objeto de intrigas, ambiciones y batallas entre espíritus celestiales que cada cierto tiempo (unos pocos miles de años) cambia de manos según que bando resulte ganador de la refriega de turno.
No es una novela anticlerical, ni siquiera antireligiosa. France trata a los ángeles y sus asuntos como si de los de un país extranjero se tratara, la lucha del bien contra el mal tampoco tiene mucho que ver, hay más de cinismo y caradurismo por parte de unos y de otros que de auténtico posicionamiento hacia la bondad o la maldad.









La rebelión de los ángeles (fragmento)

El ángel emprendió su camino por las calles invadidas de una bruma rojiza, salpicada de luces amarillas y blancas, y en las que los caballos resoplaban su aliento humeante y los faros de los autos pasaban a gran velocidad.

[…] Buscó en un pequeño restaurante pero como no encontraba el rostro que andaba buscando, pues en la sala no había ningún ángel, tomó asiento en un pequeño velador de mármol que quedaba libre.

Cuando les aguijonea el hambre, los ángeles necesitan comer igual que los animales terrestres, y los alimentos que ingieren, transformados por el calor digestivo, se asimilan a su sustancia celestial. […]

Cuando estaba terminando su frugal cena, un joven con aspecto de pordiosero y ropas raídas entró en el restaurante y, tras buscar con la mirada entre las mesas, se aproximó al ángel y le saludó llamándolo Abdiel, pues él también era un espíritu celeste. […]

Su caída, producida hacía dos años, había sido repentina. Pertenecía al octavo coro de la tercera jerarquía, y tenía como misión transmitir la gracia a los fieles, que todavía perduran en buen número en Francia, especialmente entre los oficiales superiores del ejército de tierra y de la armada.

-Una noche de verano –contó-, cuando descendía del cielo para repartir consuelos, perseverancias e indulgencias a varias personas piadosas del barrio de l'Etoile, mis ojos, aunque estaban acostumbrados a los resplandores inmortales, se deslumbraron ante las flores de fuego que sembraban los Campos Elíseos. Grandes candelabros que señalaban bajo los árboles la entrada a los cafés y restaurantes, conferían a las hojas los preciosos destellos de las esmeraldas. Largas guirnaldas de perlas luminosas delimitaban los recintos a cielo abierto, en los que se apretaba una multitud de hombres y mujeres ante una orquesta festiva y cuyas canciones llegaban confusamente a mis oídos. La noche era calurosa; mis alas empezaban a acusar descanso. Descendí hasta uno de esos conciertos y me mezclé, invisible, entre el auditorio. En ese momento apareció una mujer en el escenario, vestida con un traje corto de lentejuelas. Los reflejos de las candilejas y la pintura de su rostro impedían ver de ella otra cosa que su mirada y su sonrisa. Su cuerpo era flexible y voluptuoso. Cantó y bailó… Arcadio, siempre disfruté con la música y la danza; pero la voz corrosiva y los movimientos insinuantes de aquella criatura me provocaron una turbación desconocida. Palidecí, enrojecí, mis ojos se nublaron, la lengua se me secó en la boca; me quedé paralizado.

Y Teófilo le contó entre lamentos que había caído poseído por el deseo de aquella mujer y que no había regresado al cielo; pero, como había adoptado la forma humana se adaptó a la vida terrestre, pues está escrito: «En aquel tiempo, los hijos de Dios vieron que las hijas de los hombres eran hermosas».

Era un ángel caído, y a pesar de haber perdido su inocencia al tiempo que la contemplación de Dios, conservaba al menos el candor espiritual. Se vistió con unos harapos que sustrajo del escaparate de un revendedor israelí y fue al encuentro de aquella a quien amaba. Se llamaba Bouchotte y vivía en un pisito, en Montmartre. Se arrojó a sus pies y le dijo que era adorable, que cantaba de forma deliciosa, que la amaba con locura, que por ella renunciaba a su familia y a su patria, que era músico y no carecía de medios de subsistencia. Conmovida por tanta pasión y candor, por tanta miseria y amor, Bouchotte le dio de comer, le vistió y le amó. […]



Antes del Fin - Ernesto Sábato




Antes del fin. Memorias
Ernesto Sabato


Las memorias de Ernesto Sabato, es un libro único que constituye su testamento espiritual. Es la historia de un joven nacido en La pampa, que emprende con éxito una carrera altamente especializada en el mundo científico y llega incluso a trabajar en el centro Curie de París, para luego, en contacto con los surrealistas, abandonar la ciencia por la literatura y el arte, en un gesto valeroso y retador, y con su primera novela, rechazada por multitud de editores, obtener el reconocimiento de Albert Camus y Thomas Mann. Es también, por otra parte, la historia de un hombre rebelde, afín desde muy pronto al anarquismo y a la izquierda revolucionaria, que
descubre y denuncia las máscaras del totalitarismo soviético para luego, ya en su vejez, presidir con extraordinario coraje personal la comisión que investiga el horror de los desaparecidos en Argentina y desvelar la magnitud del genocidio. La alianza de rigor ético, acento lírico y firme voluntad solidaria con los desposeídos confiere a Antes del fin el carácter de un libro único: constituye, como pocas obras de hoy en día, el legado esencial de un gran escritor para las generaciones que lo suceden.

[Información de la editorial Seix-Barral]





Adolescente sin luz, tu grave pena llorás, tus sueños no volverán, corazón, tu infancia ya terminó.
La tierra de tu niñez quedó para siempre atrás sólo podés recordar, con dolor, los
años de su esplendor. Polvo cubre tu cuerpo, nadie escucha tu oración, tus sueños
no volverán, corazón, tu infancia ya terminó.


HASTA SIEMPRE, MAESTRO!!


Espartaco, militancia desde el arte.



Grupo Espartaco


“El arte, no puede ni debe esta desligado de la acción política
y de la difusión militante y educadora (...)
El arte revolucionario latinoamericano debe surgir, en síntesis,
como expresión monumental y pública.”





En 1959, el mundo de la cultura - y especialmente, el de la plástica - en la Argentina se conmueve por el lanzamiento del Grupo "Espartaco". Lo integran Ricardo Carpani, Juan Manuel Sánchez, Mario Mollari, Carlos Sessano, Espirilio Butte, Juana Elena Diz y Pascual Di Bianco. Con él, los trabajadores - proscriptos de la escena política y gremial por la contrarrevolución - ingresan al arte, con sus gestos airados, su mirada amenazante, sus puños de hierro.

Figurativos, de tinte expresionista con sentido social y acento americano, son obras que nos revelan los momentos de mayor fuerza y diversidad del arte argentino. A todos los une un mismo fin, el de contribuir a que el sujeto vea a través del arte lo que el sistema le oculta. La búsqueda de nuestras raíces latinoamericanas, da lugar al surgimiento de una iconografía en la que el color es un todo con el dibujo y, a su vez, un todo con la temática que refiere a los obreros industriales, los campesinos, perfiles manufactureros. Una sola y bien definida geografía, sea ciudad o campo, la que nos deja plasmada en los sentidos nuestra Latinoamérica. De manera que con un lenguaje nuevo, estos artistas apuestan a impactar tanto en círculos artísticos como en entornos fabriles. Lo que los llevó a apropiarse del muralismo mexicano, con la convicción de que el arte debía llegar hasta las masas. Los miembros del Grupo plantean la no existencia de un arte nacional “puesto que culturalmente nos hallamos sometidos a un vasallaje colonial. (…) No negamos que haya grandes pintores como Berni o Spilimbergo, pero la mayoría se desenvuelve bajo una órbita de europeización total. A nosotros, en cambio, nos une el arte de toda la América Indígena”.
Si bien el grupo continúa en actividad hasta 1968, Carpani y Di Bianco se separan en 1961 para insertarse en el movimiento obrero. Primero en la CGT, a través de la Unión Obrera Metalúrgica, y más tarde decididamente en la CGT de los Argentinos. Desde la Federación Gráfica Bonaerense, Carpani trabaja junto al líder sindical Raimundo Ongaro en la realización de afiches y carteles, convirtiéndose en un hito cuya producción terminará marcando toda una época del cartel político en el país.








La historia del Grupo Espartaco está indisolublemente ligada a la época que le dio entidad. Sus trabajos nos hablan de un tiempo en el que las fábricas humeaban las 24 horas y los obreros peleaban por mejoras. En ese sentido, su conformación y su disolución marcan el período que le dio la vida. La ebullición política de los jóvenes universitarios y obreros industriales gritaba, en la mayoría de los idiomas, que la utopía era posible.

La exposición del grupo se acompañó con la fundamentación ideológica a través de la cual estos jóvenes pintores planteaban la síntesis entre la vanguardia formal y los contenidos populares y latinoamericanos. El manifiesto fue redactado, en sus partes fundamentales por Ricardo Carpani y sostenía lo siguiente:

MANIFIESTO DEL GRUPO "ESPARTACO"


Es evidente que en nuestro país, a excepción de algunos valores aislados, no ha surgido hasta el momento una expresión plástica trascendente, definitoria de nuestra personalidad como pueblo. Los artistas no podemos permanecer indiferentes ante este hecho, y se nos presenta con carácter imperativo la necesidad de llevar adelante un profundo estudio del origen de esta frustración.

Si analizamos la obra de la mayor parte de los pintores argentinos, especialmente de aquellos que la crítica ha llevado a un primer plano, observaremos como característica común el total divorcio con nuestro medio, el plagio sistematizado, la repetición constante de viejas y nuevas fórmulas, que si en su versión original constituyeron auténticos hallazgos artísticos, al ser copiados sin un sentido creativo se convierten en huecos balbuceos de impotentes.

Las causas determinantes de esta situación están en la base misma de nuestra vida económica y política, de la cual la cultura es su resultado y complemento. Una economía enajenada al capital imperialista extranjero no puede originar otra cosa que el coloniaje cultural y artístico que padecemos. La oligarquía, agente y aliada del imperialismo, controla directa o indirectamente los principales resortes de nuestra cultura, y, a través de ellos, enaltece o sume en el olvido a los artistas seleccionando únicamente a aquellos que la sirven. Constituye, además, por ser la clase más pudiente, el principal mercado comprador de obras artísticas. En virtud de los intereses que representa se caracteriza en el plano cultural por una mentalidad extranjerizante, despreciativa de todo lo genuinamente nacional y por lo tanto popular.

El resultado de todo esto es que el artista no tiene otro camino para triunfar que el de la renuncia a la libertad creadora, acomodando su producción a los gustos y exigencias de aquella clase, lo que implica su divorcio de las mayorías populares que constituyen el elemento fundamental de nuestra realidad nacional. Es así como, al dar la espalda a las necesidades y luchas del hombre latinoamericano, vacía de contenido su obra, castrándola de toda significación, pues ya no tiene nada trascendente que decir. Se limita entonces a un mero juego con los elementos plásticos, virtuosismo inexpresivo, en algunos casos de excelente técnica, pero de ninguna manera arte, ya que éste sólo es posible cuando se produce una total identificación del artista con la realidad de su medio.

No se piense que esta última sea una afirmación arbitraria: constituye un problema que hace a la esencia misma del arte. En efecto, un arte nacional es la única posibilidad que existe de hacer arte. A través de las mejores obras de los más grandes artistas de la historia, percibimos ante todo, el espíritu de la sociedad que las engendró. No puede ser de otra manera, ya que el artista es un hombre y todo hombre se conforma fundamentalmente según los elementos sociales que gravitan sobre él: productor de la sociedad, al expresarse artísticamente, si lo hacen en un sentido profundo y con sinceridad, dará expresión, de un modo inevitable, al medio que lo rodea.

El ritmo del crecimiento histórico es variable para cada sociedad y esa variación es el principal elemento incidente en el origen de las nacionalidades. En consecuencia toda obra artística, por el hecho de ser una expresión social, necesariamente ha de ser también una expresión nacional. Generalizando, podría decirse que el arte surge como el resultado de una necesidad de expresión individual, que al concretarse será una expresión nacional, pues el individuo fundamentalmente es producto de la nación, y culminará finalmente, en expresión universal, ya que los problemas trascendentes del hombre son universales.

El problema del surgimiento de un arte nacional en nuestro país, determina el verdadero alcance que debe tener para nosotros el término "nacional". Unidad geográfica, idiomática y racial; historia común, problemas comunes y una solución de esos problemas que sólo será factible mediante una acción conjunta, hacen de Latinoamérica una unidad nacional perfectamente definida. La gran Nación Latinoamericana ya ha tenido en Orozco, Rivera, Tamayo, Guayasamín, Portinari, etc., fieles intérpretes que partiendo de las raíces mismas de su realidad han engendrado un arte de trascendencia universal. Este fenómeno no se ha dado en nuestro país salvo aisladas excepciones.

El arte latinoamericano, considerando las características sociales y políticas de nuestro continente, ha de estar necesariamente imbuido de un contenido revolucionario, que será dado por el libre juego de los elementos plásticos en sí, prescindiendo de la anécdota desarrollada, si es que la hay. La anécdota podrá tener una importancia capital para el artista cuando aborda una temática que siente profundamente y en la cual encuentra inspiración; pero en última instancia no constituye el elemento que justifica y determina la validez intrínseca de la obra de arte, ni es de ella que emana el contenido de su trabajo. De ahí lo absurdo de cierto tipo de pintura pretendidamente revolucionaria que se limita a describir escenas de un revolucionarismo dudoso, utilizando un realismo caduco y superado. No es de extrañar entonces que por su misma inoperancia esta pintura sea tolerada, y hasta en cierto modo favorecida, por aquellos mismos que combaten toda expresión artística auténticamente nacional y revolucionaria.

Es imprescindible dejar de lado todo tipo de dogmatismo en materia estética; cada cual debe crear utilizando los elementos plásticos en la forma más acorde con su temperamento, aprovechando los últimos descubrimientos y los nuevos caminos que se van abriendo en el panorama artístico mundial y que constituyen el resultado de la evolución de la Humanidad, pero eso sí, utilizando estos nuevos elementos con un sentido creativo personal y en función de un contenido trascendente.

Todo intento de creación de un arte nacional, es consecuentemente combatido por ciertos críticos al servicio de la prensa controlada por el capital imperialista. Se ha apelado a todos los recursos, desde el ataque directo, en nombre de una universalidad abstracta, hasta la rumbosa presentación de algo que, como arte nacional, ni siquiera es arte.

Se trata en verdad de refractar en el campo de la creación artística, el sometimiento económico y político de las mayorías, pero simultánea e indisociablemente, sus luchas por emanciparse. Porque en la medida en que el arte llama y despierta el inconsciente colectivo de la humanidad, pone en movimiento las más confusas aspiraciones y deseos, exalta y sublima todas las represiones a que se ve sometido el hombre moderno, es un poderoso e irresistible instrumento de liberación. El arte es el libertador por excelencia y las multitudes se reconocen en él, y su alma colectiva descarga en él sus más profundas tensiones para recobrar por su intermedio las energías y las esperanzas. De ahí que para nosotros el arte sea un insustituible arma de combate, el instrumento precioso por medio del cual el artista se integra con la sociedad y la refleja, no pasiva sino activamente, no como un espejo sino como un modelador.

De las manos de la nueva generación de artistas latinoamericanos habrá de salir el arte de este continente, que aún no ha realizado su unidad; quizá le esté reservado por este arte revolucionario realizarla antes en la esfera creadora como síntoma de la inevitable unificación política. Pues no sería la primera vez en la historia que el arte se anticipa a los hechos económicos o políticos; y tal vez en ello reside su grandeza. Partiendo de la realidad, la prefigura y la renueva.

Estos objetivos se cumplirán mediante una doble acción: el arte, no puede ni debe estar desligado de la acción política y de la difusión militante y educadora de las obras en realización. El arte revolucionario latinoamericano debe surgir, en síntesis, como expresión monumental y pública. El pueblo que lo nutre deberá verlo en su vida cotidiana. De la pintura de caballete, como lujoso vicio solitario hay que pasar resueltamente al arte de masas, es decir, al arte.

GRUPO "ESPARTACO"
Abril de 1961



Arte y Revolucion en America Latina
Ricardo Carpani








“Nuestras clases dominantes han procurado siempre que los trabajadores
no tengan historia, no tengan doctrina, no tengan héroes y mártires.
Cada lucha debe empezar de nuevo, separada de las luchas anteriores:
la experiencia colectiva se pierde, las lecciones se olvidan.
La historia parece así como propiedad privada cuyos dueños
son los dueños de todas las otras cosas.”

Rodolfo Walsh



La genealogía de la moral - Friedrich Nietzsche


La genealogía de la moral
Friedrich Nietzsche





Escrita en 1887, un año antes del advenimiento de la locura, ésta es con seguridad la obra más “sombría y cruel” de Nietzsche. En ella Nietzsche se atreve a llevar sus planteamientos hasta las últimas consecuencias y no retrocede ante la verdad, por muy “áspera, fría y desagradable” que sea. Su primer tratado se ocupa de la contraposición entre los conceptos de 'bueno' y 'malo', así como de la posterior transformación de su significado por obra de la interpretación judeo-cristiana. El segundo tratado analiza la mala conciencia, cuya causa en épocas primitivas era la culpa entendida no en el sentido de responsabilidad moral, sino como equivalente a deuda material. La última parte, que anuncia el nuevo ideal de superhombre, analiza el significado del ascetismo.








Prólogo
Nosotros los que conocemos somos desconocidos para nosotros, nosotros mismos somos desconocidos para nosotros mismos: esto tiene un buen fundamento. No nos hemos buscado nunca, –– ¿cómo iba a suceder que un día nos encontrásemos? Con razón se ha dicho: «Donde está vuestro tesoro, allí está vuestro corazón»; nuestro tesoro está allí donde se asientan las colmenas de nuestro conocimiento. Estamos siempre en camino hacia ellas cual animales alados de nacimiento y recolectores de miel del espíritu, nos preocupamos de corazón propiamente de una sola cosa ––de «llevar a casa» algo. En lo que se refiere, por lo demás, a la vida, a las denominadas «vivencias», –– ¿quién de nosotros tiene siquiera suficiente seriedad para ellas? ¿O suficiente tiempo? Me temo que en tales asuntos jamás hemos prestado bien atención «al asunto»: ocurre precisamente que no tenemos allí nuestro corazón ––¡y ni siquiera nuestro oído! Antes bien, así como un hombre divinamente distraído y absorto a quien el reloj acaba de atronarle fuertemente los oídos con sus doce campanadas del mediodía, se desvela de golpe y se pregunta «¿qué es lo que en realidad ha sonado ahí?», así también nosotros nos frotamos a veces las orejas después de ocurridas las cosas y preguntamos, sorprendidos del todo, perplejos del todo, «¿qué es lo que en realidad hemos vivido ahí?», más aún, «¿quiénes somos nosotros en realidad?» y nos ponemos a contar con retraso, como hemos dicho, las doce vibrantes campanadas de nuestra vivencia, de nuestra vida, de nuestro ser ––¡ay!, y nos equivocamos en la cuenta... Necesariamente permanecemos extraños a nosotros mismos, no nos entendemos, tenemos que confundirnos con otros, en nosotros se cumple por siempre la frase que dice «cada uno es para sí mismo el más lejano», en lo que a nosotros se refiere no somos «los que conocemos»...




El Ángel de la Ventana de Occidente - Gustav Meyrink



El Ángel de la Ventana de Occidente
Gustav Meyrink





¡Lee o no leas! ¡Quema o persevera! Añade polvo al polvo. Nosotros, de la raza de Hoël Dhat, príncipes de Gales, estamos muertos. Mascee.







El ángel de la ventana de occidente, última novela de Meyrink, narra la fantástica historia de un hombre que, tras hacerse cargo de los papeles de un primo difunto,comienza a tener pesadillas y visiones sobre su antepasado, el enigmático John Dee, célebre ocultista inglés que vivió entre 1527 y 1609. Recibe entonces la visita de dos extraños personajes, el misterioso Lipotin y la seductora Assja Chotokalungin, que le reclaman la legendaria punta de lanza de Hoël Dhat, de la que él nada sabe. La acción de la novela, que transcurre en Inglaterra, Polonia y Praga, oscila entre lo real y lo onírico, y viaja desde los albores del siglo XX al reinado de Isabel I. El relato pretende ilustrar la ley del karma, así como exponer los fundamentos de la verdadera alquimia: procurar al ser humano un vehículo inmortal para lograr la resurrección de la carne.



El Dr. Jekyll y Mr. Hyde - R. L. Stevenson



El Dr. Jekyll y Mr. Hyde
R. L. Stevenson








Esta breve novela –apenas 126 páginas- es una incursión en los abismos insondables del Hombre. Stevenson realiza una profunda reflexión sobre la teoría de que todo ser humano lleva en sí una parte de maldad, la cual puede aflorar en cualquier momento, si se dan las condiciones oportunas, y convertirlo en el mismísimo Mal personificado.
La obra es también una crítica a la ambición humana. No debemos jugar a ser Dios -parece decir el autor- pues las consecuencias nos desbordarán y terminarán aniquilándonos.
Formalmente, Stevenson, curtido en la novela de aventuras, sabe llevar el tempo de la narración de modo magistral, dosificándonos la historia de tal manera que no decaiga nuestra atención y manteniendo el suspense en todo momento. Tanto los pasajes descriptivos como los dialogados, tienen el ritmo adecuado para mantener nuestro interés, sin ocultarnos datos relevantes pero, también, excluyendo lo accesorio. Y el recurso final a la carta aclaratoria –a modo de testamento vital- de Jekyll es magistral.




El Club de Lucha (Fight Club) - Chuck Palahniuk




El Club de Lucha (Fight Club)

Chuck Palahniuk






"Somos los hijos medianos de la historia, educados por la television para creer que un día seremos millonarios y estrellas de cine y estrellas de rock, pero no es así. Y acabamos de darnos cuenta —dice Tyler—. Así que no intente jodernos". Eso declara Tyler Durden, fundador de los Clubs de Lucha, que se propagan (en la novela de la que es protagonista) por Norteamérica como una epidemia; y está hablando muy en serio. Es la voz de toda una generación usada y traicionada; atrapada en la esclavitud consumista; en una vida diseñada y controlada por los medios de difusión. O al menos es la voz que Chuck Palahniuk otorga a esa generación, a través de los personajes que conforman el mundo siniestro y violento que nos ofrece su primera novela El Club de lucha (Muchnik Editores, 1999).






La novela de Palahniuk (Portland, Oregón, 1964) es un catálogo de desmoronamientos humanos y sociales, un catálogo corrosivo, escrito en una prosa económica, que va armando su historia a chispazos, mediante situaciones e imágines que supuran una presión enorme; una desestabilizadora desazón. Esta novela destaca por el control de su estructura y por la seducción con que despliega ante nosotros un universo de brutalidad y desamparo. Otro logro es el ritmo, que no es propiamente literario —en el sentido clásico de la literatura como historia contada— sino mediático. Un ritmo que desvela un paisaje deshumanizado, fragmentario, que se manifiesta mediante descargas de información, ráfagas de estímulos visuales o sensoriales. Palahniuk no intenta contarnos una historia; más bien se las arregla para mostrarnos una en páginas que funcionan como pantallas. Páginas descarnadas, fluorescentes, sanguinolentas como las de un telediario. En eso descansa gran parte del poder de esta novela que tiene sus antecedentes en La Naranja Mecánica de Anthony Burgess y en obras de Boris Vian tales como Escupiré sobre vuestra tumba y La hierba roja. Aunque a la prosa del joven Palahiuk todavía le es ajena la suntuosa elegancia y la efectividad de la obra maestra de Burgess.

El Club de Lucha discurre en una realidad grotesca, triturada, en la que el narrador encuentra equilibrio sólo en las sesiones de terapia de grupos para enfermos terminales. A las que acude no porque sufra una enfermedad terminal sino para que alguien le preste atención. Allí conoce a Marla, un fraude como él, que vive robando vaqueros de las lavadoras y vendiéndolos en tiendas de ropa de segunda mano. Marla, con la que vive una de las más extrañas historias de amor desde la de Colin y Cloe en La espuma de los días de Vian. Y está Tyler, proyeccionista de cine y camarero a destajo. Tyler que se dedica a insertar fotogramas de penes enhiestos y vaginas gigantescas en películas como Bambi. Tyler, con quien el narrador funda los Clubs de Lucha y el Proyecto Estragos, que tienen como objetivo destruir la sociedad de consumo, instaurar la anarquía, acabar con la civilización y de esa forma "mejorarla un poco"; Tyler que fabrica jabones con grasa de liposucciones.

Chuck Palahniuk ha irrumpido en la novelística norteamericana con un libro sorprendente, fresco y retorcido, siniestro y clarividente. El escritor trabajó como voluntario en un asilo de enfermos terminales y asegura que muchas de las cosas que acontecen en su novela le han sucedido a él o a sus amigos. Bajo la sombría —salpicada de un humor sangriento— apariencia de esta novela de ecos falsamente fantásticos, late la realidad nuestra de cada día. Leerla es una experiencia desasosegante y, sí, también, deliciosa; que hará que de ahora en adelante tomemos muy en serio a su autor.

fuente


Rebeca y Los Cantos Demoníacos- Jorge Alvarez Lozano



Rebeca y Los Cantos Demoníacos
Jorge Alvarez Lozano (Mex)




Hubo un cielo y una guerra, hermanos combatiendo en una guerra sin razón; como si las guerras tuvieran razón.
Los ganadores escribieron sobre sus libros y fraguaron en la historia sus palabras. Nadie recordó a quienes cayeron bajo el fuego de sus espadas; ni sus pensamientos y sentimientos fueron conocidos; hasta hoy.






Rebeca y los Cantos Demoníacos es un compendio de 8 Cantos, 3 cuentos cortos y una novela corta en los cuales se narran los pensamientos y sentimientos de los ángeles caídos en la gran guerra del cielo.
Comandados por Luzbel, el orgullo del cielo se levantó en armas contra su creador para dar inicio a la más cruel y sanguinaria guerra que la creación ha conocido; una guerra que tuvo sus repercusiones en todos los recovecos de todos los multiversos.
A través de estos escritos se reflejan parte de sus sentimientos tras haber sido arrojados al páramo sin Dios. El Infierno.


El Misterio de Salem´s Lot - Stephen King



El Misterio de Salem´s Lot
Stephen King




Veinte años atrás, por una apuesta infantil, Ben Mears entró en la casa de los Marsten. Y lo que vio entonces aún puebla sus pesadillas. Ahora, como escritor consagrado vuelve a Salem´s Lot para exorcisar sus fantasmas. Salem´s Lot es un pueblo tranquilo y adormilado donde nunca pasa nada, excepto la vieja tragedia de la casa de los Marsten. Y el perro muerto colgado de la verja del cementerio. Y el misterioso hombre que se instaló en la casa de los Marsten. Y los niños que desaparecen, los animales que mueren desangrados. Y la espantosa presencia de Ellos, quienesquiera que sean Ellos.

Ben Mears ha vuelto a casa. No sabe qué busca, si reconciliarse con fantasmas del pasado o una última oportunidad antes de dejarse hundir en la desesperación. El Solar de Salem continúa siendo el mismo pueblo rústico de su infancia, un pedazo inmóvil del noroeste de Estados Unidos donde la vida corre a una velocidad tan lenta que resulta casi suicida, fácilmente alcanzable por los demonios del horror, la indiferencia y el pasado.

Según Stephen King el mal que ha habitado entre los muros de una casa durante muchos años, si es lo suficientemente poderoso y elemental, puede llegar a impregnar el sitio hasta un punto muy cercano a la saturación. Además el escritor explota el tan conocido axioma de que la maldad solo puede encontrar acomodo en la gente y los pueblos propensos a ella.





Eva Luna - Isabel Allende



Eva Luna
Isabel Allende





En Eva Luna, su tercera novela, Isabel Allende recupera su país a través de la memoria y de la imaginación. La cautivadora protagonista de este libro es un nostálgico alter ego de la autora, que se llama a sí misma "ladrona de historias", precisamente porque en las historias radica el secreto de la vida y del mundo. Como una moderna Scherezade, Eva Luna convierte su vida en una tragicomedia por la que desfila una sorprendente galería de personajes: un embalsamador de cadáveres, una madrina que sobrevive a una decapitación, una mujer con cuerpo de hombre, un fotógrafo austríaco atormentado por los recuerdos del nazismo...
Con ternura e impecable factura literaria, Isabel Allende perfila el destino de sus personajes como parte indisoluble del destino colectivo de un continente marcado por el mestizaje, las injusticias sociales y la búsqueda de la propia identidad. Este logrado universo narrativo es el resultado de una lúcida conciencia histórica y social, así como de una propuesta estética que constituye una singular expresión del realismo mágico. (Lecturalia)





"Me llamo Eva, que quiere decir vida, según un libro que mi madre consultó para escoger mi nombre. Nací en el último cuarto de una casa sombría y crecí entre muebles antiguos, libros en latín y momias humanas, pero eso no logró hacerme melancólica, porque vine al mundo con un soplo de selva en la memoria. Mi padre, un indio de ojos amarillos, provenía del lugar donde se juntan cien ríos, olía a bosque y nunca miraba al cielo de frente, porque se había criado bajo la cúpula de los árboles y la luz le parecía indecente. Consuelo, mi madre, pasó la infancia en una región encantada, donde por siglos los aventureros han buscado la ciudad de oro puro que vieron los conquistadores cuando se asomaron a los abismos de su propia ambición. Quedó marcada por el paisaje y de algún modo se las arregló para traspasarme esa huella.

Los misioneros recogieron a Consuelo cuando todavía no aprendía a caminar, era sólo una cachorra desnuda y cubierta de barro y excremento, que entró arrastrándose por el puente del embarcadero como un diminuto Jonás vomitado por alguna ballena de agua dulce. Al bañarla comprobaron sin lugar a dudas que era niña, lo cual les creó cierta confusión, pero ya estaba allí y no era cosa de lanzarla al río, de modo que le pusieron un pañal para tapar sus vergüenzas, le echaron unas gotas de limón en los ojos para curar la infección que le impedía abrirlos y la bautizaron con el primer nombre femenino que les pasó por la mente. Procedieron a educarla sin buscar explicaciones sobre su origen y sin muchos aspavientos, seguros de que si la Divina Providencia la había conservado con vida hasta que ellos la encontraron, también velaría por su integridad física y espiritual, o en el peor de los casos se la llevaría al cielo junto a otros inocentes. Consuelo creció sin lugar fijo en la estricta jerarquía de la Misión. No era exactamente una sirvienta, no tenía el mismo rango que los indios de la escuela y cuando preguntó cuál de los curas era su papá, recibió un bofetón por insolente. Me contó que había sido abandonada en un bote a la deriva por un navegante holandés, pero seguro ésa es una leyenda que inventó con posterioridad para librarse del asedio de mis preguntas. Creo que en realidad nada sabía de sus progenitores ni de la forma como apareció en aquel lugar.

La Misión era un pequeño oasis en medio de una vegetación voluptuosa, que crece enredada en sí misma desde la orilla del agua hasta las bases de monumentales torres geológicas, elevadas hacia el firmamento como errores de Dios. Allí el tiempo se ha torcido y las distancias engañan al ojo humano, induciendo al viajero a caminar en círculos. El aire húmedo y espeso, a veces huele a flores, a hierbas, a sudor de hombres y alientos de animales. El calor es oprimente, no corre una brisa de alivio, se caldean las piedras y la sangre en las venas. Al atardecer el cielo se llena de mosquitos fosforescentes, cuyas picaduras provocan inacabables pesadillas, y por las noches se escuchan con nitidez los murmullos de las aves, los gritos de los monos y el estruendo lejano de las cascadas, que nacen de los montes a mucha altura y revientan abajo con un fragor de guerra. El modesto edificio, de paja y barro, con una torre de palos cruzados y una campana para llamar a misa, se equilibraba como todas las chozas, sobre pilotes enterrados en el fango de un río de aguas opalescentes cuyos límites se pierden en la reverberación de la luz. Las viviendas parecían flotar a la deriva entre canoas silenciosas, basura, cadáveres de perros y ratas, inexplicables flores blancas." [...]


La Feria de las Tinieblas - Ray Bradbury



La Feria de las Tinieblas
Ray Bradbury




La feria de las Tinieblas es la historia de dos muchachos, James Nightshade y William Halloway, y del mal que empieza a invadir su pequeña ciudad del Medio Oeste con la llegada una medianoche de otoño de una feria ominosa. Los dos chicos descubren que con unas pocas vueltas en el carrusel pueden apresurar el tiempo y transformarse en adultos, o ir hacia atrás y volver a los balbuceos de la primera infancia. ¿Cómo podrán salvar sus almas y su pueblo de la maldad que les ronda? ¿Qué haríamos si nuestros más oscuros deseos pudieran hacerse realidad? Bradbury revela la parte más oscura del alma humana al explorar el delicioso placer de un otoño perfectamente terrorífico e inolvidable.









La feria de las tinieblas, capitulo primero

I - Llegadas

1
El vendedor de pararrayos llegó poco antes de la tormenta. Vino por una calle de Green Town, Illinois, en ese nublado día de fines de octubre, echando miradas furtivas por encima del hombro. En alguna parte, no muy lejos, unos vastos relámpagos golpeaban la tierra. En alguna parte la tormenta era ya evidente: una bestia enorme de dientes horribles.

El vendedor caminó arrastrando la pesada valija de cuero, donde resonaban y se sacudían unos complicados rompecabezas de quincalla que la lengua conjuraba de puerta en puerta, hasta que al fin llegó a un rectángulo de césped que parecía mal cortado.



Lenore, "La Hermosa Niña Muerta"



Lenore, "La Hermosa Niña Muerta" es un personaje ficticio creado por Roman Dirge, inspirado en el poema "Lenore," de Edgar Allan Poe.



Lenore la niña muerta


Era una niña normal de 10 años de edad. Tenía cabello negro y ojos pizpiretos. Era una súper-dúper niña. Pero un día se puso muy enferma, hasta que ya no lo estuvo más, es decir, murió... O eso parecía, ya que incluso la enviaron a la Morgue, introdujeron en sus venas un líquido 'embálmico' y la declararon clínicamente muerta.

Luego de todo el proceso de 'declarar muerto a alguien' Lenore despertó en la morgue gritando: "just sleepin'!" (sólo dormía!!) asustando al médico encargado de los cadáveres. Para entonces era muy tarde ya que el líquido 'embálmico' había recorrido todo el cuerpo de Lenore, dejándolo en un estado muerto pero con capacidades de los vivos. Toda una ironía.

El médico que la atendió mientras se encontraba enferma -y el que la consideró muerta- digo que quizá Lenore pasaba por uno de esos sueños letárgicos. Lo único que podía hacer era dejarla ir a la 'reunión que todos los familiares de la niña muerta hacían en su honor' -El Funeral-... Al llegar a la 'reunión', la familia de Lenore parecía ya no comprenderla ni saber quién era, así que la rechazaron temerosos de su nuevo estado. Inclusive uno de sus primos dijo que Lenore parecía un panda.

Lenore se encontraba destrozada, triste y desamparada. Era tiempo de que ella iniciara una nueva vida... muerta... Sí, eso...

A pesar de ya no contar con su antigua familia, ella pudo ganar la comprensión, el apoyo y el... amor?... de una nueva familia compuesta por miembros bastante excéntricos, extraños e inclusive terroríficos... Pero al fin y al cabo familia. Incluso pudo llegar a tener su primer 'novio'...

La niña muerta, finalmente se sobrepuso a la pérdida de sus antiguos seres queridos. Desarrolló una nueva personalidad que incluía una extraña afición por jugar con pequeños animales, ya sean vivos o muertos, así como pasar el tiempo asesinando gnomos, gatos, ratones, hadas...

Actualmente habita una enorme casa tenebrosa rodeada de una infinidad de gatos muertos -y vivos- así como su mejor amigo Ragamuffin. El vecino que cuida de ella y a su vez ella cuida de Malakai, Taxidermio. Así como su 'novio' de 20 segundos, el Mr. Gosh.

Lenore disfruta, además de jugar con animales, realizar sus siempre populares fiestas de té, donde invita a sus amigos.

Esta hermosa niña muerta no es una chiquilla extraña ni loca... bueno, un poco... En realidad sólo es una chica especial encerrada en un mundo extraño, ya que el mundo 'normal' no la aceptó ni la comprendió. A pesar de ello, Lenore vive feliz, satisfecha, contenta y... Vive, a pesar de su estado 'mortal'.




Comics (en inglés y español)






Lenore : El Nuevo Juguete (sub español)
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Lenore : Ragamuffin (sub español)
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Lenore : Bloaty la rana...(sub español)
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Personajes

Lenore
Lenore es una niña no-muerta, zombie, de 10 años que vive en una tenebrosa mansión con sus otros escalofriantes amigos.Que en vida, enfermó gravemente y sus padres al ver su hermosura decidieron embalsamarla. Sin embargo ella sigue viva e incluso es consciente de su calidad de "muerta-viva". en la edición número 14 se revela más sobre su origen. Su personaje ha pasado de ser malicioso en sus primeros comics, lastimando gente por venganza, a un personaje oscuro que mata gente por "accidente", por el hecho de que generalmente desconoce su entorno así como el hecho de que está muerta. Lenore dice que ama a los animales (especialmente a los gatos), aunque constantemente mata a sus mascotas.

Ragamuffin
Ragamuffin a pimera vista parece un muñeco con gusanos como cabello relleno de poliéster , pero tiene una interesante historia y personalidad. Ragamuffin fue un vampiro que se alimentaba de carne de vivos. Una noche atacó a una joven mujer y se la comió, pero desafortunadamente, era la hermana de una poderosa bruja. La bruja lo maldijo convirtiéndolo en un muñeco. La maldición solo podía ser rota con una gota de sangre, pero como la sangre de Lenore fue mezclada con fluído de embalsamiento revivió pero nunca dejará de ser un muñeco (aunque fue brevemente transformado de nuevo en su cuerpo al final de la edición #11, pero regresado a su forma de muñeco en el último cuadro de la edición #12). Vive con Lenore en su vieja mansión y tiene el dudoso placer de ser su paciente cuidador en la mayoría de sus aventuras.
Ragamuffin es un poco inseguro en algunas de las locas ideas de Lenore. Sin embargo, como se muestra en comics posteriores, Ragamuffin es muy fiel a Lenore, a menudo le ayuda en sus planes en los episodios animados. Incluso amenaza y golpea al Sr. Gosh cuando molesta a Lenore. En la edición #9, cuando Lenore se enamora brevemente del Sr. Gosh (cuando se quita su máscara) y manda lejos a Ragamuffin, el parece herido y le dice que tiene sentimientos.

Mr. Gosh
Mr. Gosh parece ser un títere de calcetín del tamaño de un humano con botones como ojos, pero es una persona muerta con una bolsa en su cabeza. Está loca y obsesivamente enamorado de Lenore. Incluso cuando ha sido asesinado en varias ocasiones por Lenore, el regresa de la tumba; a menudo diciendo que la perdona por matarlo, pues supone que siempre lo hace por "accidente". También es impopular entre algunos de los amigos de Lenore, especialmente Ragamuffin.
Algunas de sus lesiones incluyen: ser envenenado, prendido en fuego, golpeado con una pala, apuñalado en la cabeza 6 veces, la explosión de su cabeza, aún así ama a Lenore con todo su corazón.

Taxidermy
Taxidermy es un hombre con la cabeza de un ciervo embalsamado, amigo de Lenore. Dice que su extraña apariencia es una 'condición médica'.Tiene una pequeña mascota llamada Malakai. Taxidermy lidera una horda de animales disecados. Esta horda aparece ocasionalmente para ayudar a Lenore y sus amigos contra sus enemigos.

Muffin Monster
El Muffin Monster tuvo su primer aparición en la edición #5 en la fiesta de té de Lenore. No se sabe mucho de él a excepción de que le gustan los muffins que parecen provocarle gases.

Kitty
A menudo Lenore lleva consigo un gatito muerto. El gatito no estaba muerto cuando Lenore lo obtuvo, pero accidentalmente mata a cada gatito que cuida. Incluso es confrontada por el espíritu del "Gatito #12" sobre su cruel comportamiento con los animales, ella dice que ellos eran malos.

Pooty Applewater(Dark Minion of the 9th layer of hell)
Pooty hizo su primera aparición en el cómic #9 como un cazarecompensas enviado a devolver a Lenore al inframundo. Ella lo convenció para dejarle quedarse y se convirtió en uno de sus amigos, desarrollando un papel importante (o más o menos) en las batallas que siguieron. Tiene un pequeño y extraño cubo de agua como cabeza y lleva un tridente.

Zombies Nazis
Versiones zombie de soldados nazis muertos que ascienden del inframundo luego que Lenore accidentalmente los liberara. Su misión una vez en la Tierra es capturar a Lenore, lo cual están cerca de lograr. Sin embargo, ellos se ven enfrentados y obstaculizados por Ragamuffin, temporalmente revertido a su estado original de vampiro, quien además cuenta con la ayuda de los extraños vecinos de Lenore, incluyendo a Taxidermy. Esta trama transcurre entre los cómics #9 al #12.

Wicket Willowbean
Wicket fue introducido en el cómic 13 y dice ser el primo de Pooty. A pesar de revelarse a sí mismo como un horrible monstruo del infierno, luego muestra su verdadera forma (supuestamente más trerrorifica), la cual es básicamente Pooty con casco.

Ouchie Boo-Boo
Hace su aparición en el cómic #10. Ouchie Boo-Boo es enviada a capturar a Pooty y Lenore para regresarlos al inframundo, disfrazándose de 'hermana de Lenore', resultando ser una hábil oponente, sin embargo Pooty mata a Ouchie en el cómic #11.



Videos AVI(sub español)


La Noche De Los Lápices


Con el secuestro de ocho militantes secundarios el viernes 16 de septiembre de 1976 comenzó uno de los crímenes que se convertiría en símbolo de la dictadura militar. Al rapto siguió la muerte de seis de ellos.
En la noche de ese viernes, ocho militantes estudiantiles secundarios de La Plata fueron secuestrados de sus casas paternas por grupos de tareas, lo que dio inicio a uno de los crímenes emblemáticos del terrorismo de Estado argentino:
La Noche De Los Lápices.



A pesar de La Noche de los Lápices, los lápices siguen escribiendo



El 16 de septiembre de 1976 diez estudiantes secundarios de la Escuela Normal Nro 3 de la Plata son secuestrados tras participar en una campaña por el boleto estudiantil. Tenían entre 14 y 17 años. El operativo fue realizado por el Batallón 601 del Servicio de Inteligencia del Ejercito y la Policía de la Provincia de Buenos Aires, dirigida en ese entonces por el general Ramón Camps, que calificó al suceso como lucha contra "el accionar subversivo en las escuelas". Este hecho es recordado como "La noche de los lápices".

LOS ESTUDIANTES SECUNDARIOS Y LA POLITICA ENTRE 1973-1976

El arribo de la democracia en el mes de mayo de 1973, luego de un proceso creciente de enfrentamientos contra la dictadura miliar que gobernaba desde junio de 1966, trajo consigo la irrupción en la vida política y social de los distintos sectores populares que habían experimentado un crecimiento sustancial durante las luchas; entre ellos, los estudiantes secundarios.

En el movimiento estudiantil secundario se vivieron experiencias hasta ese momentos inéditas en lo referente a participación política, en tanto ésta es atendida en un sentido partidario más o menos directo.

El diario La Opinión editó en 1973 un suplemento dedicado al análisis de los fenómenos políticos entre los adolescentes. En dicho suplemento se publicaron los resultados de una encuesta que realizó el periódico entre 252 estudiantes. Se comprobó que el 30,3% de los jóvenes encuestados tenía algún tipo de participación política.

La política había impregnado el conjunto de la vida estudiantil, dentro y fuera de los colegios. Las organizaciones políticas vieron incrementado notoriamente el número de sus militantes y el grado de su influencia. Según el suplemento citado, "las tres fuerzas más importantes son, en este orden, la Unión de Estudiantes Secundarios, (UES), la Federación Juvenil Comunista (FJC) y la Juventud Secundaria Peronista (JSP)"

La encuesta de La Opinión revelaba también que en 1973 los estudiantes secundarios se inclinaban ante figuras emblemáticas de la izquierda, con la salvedad de Perón, quién asumía, para una porción amplia de los estudiantes, contornos casi revolucionarios. Pese a todo, quien encabeza la encuesta era el Che Guevara con el 67%, a continuación venía J. D. Perón con 66% y a mayor distancia, Salvador Allende con 19%; Fidel Castro con 19%; Eva Perón 17 % y Mao-Tsé-Tung con 16%.

En esta encuesta queda por demás claro que para aquélla generación de estudiantes los referentes revolucionarios y socialistas eran los que ocupaban más espacio en la conciencia estudiantil.

En aquellos años se había alcanzado un nivel de conciencia, acción y participación bastante elevados con lo cual el nivel de cuestionamiento al sistema capitalista era de por demás peligroso para la burguesía y los sectores reaccionarios de nuestro país.

EL GOLPE DE 1976

En la historia de nuestro país, como en el resto de América latina, los golpes de Estado siempre estuvieron al servicio de la clase dominante y del imperialismo. Pero el golpe de Estado de 1976 se podría caracterizar no tan solo como el más sangriento vivido en la historia de nuestro país, sino también como el más pro-imperialista, ya que el estado político-económico que dejó la dictadura le sirvió al imperialismo para garantizar su hegemonía en la región durante décadas.

LOS OBJETIVOS DEL PROCESO

Uno de los objetivos más tenazmente buscado por la dictadura militar que gobernó entre 1976 y 1983 fue neutralizar a buena parte de la juventud y ganar a una porción para su propio proyecto reaccionario.

Para los que no encajaban en sus esquemas se aplicaban distintos métodos "preventivos", desde el asesinato y la desaparición, hasta la más refinadas formas de marginación social y psicológica, pasando, claro esta, por la clásica y tradicional prisión.

Cuando asumieron en 1976 los militares consideraban que en la Argentina había una generación perdida: la juventud. Esta, por la sofisticada acción de "ideólogos" se había vuelto rebelde y contestataria.

Si bien el gobierno militar toma en cuenta la situación en la que se encontraba la juventud argentina, no fue tan obstinado como para suponer que se debía atacar a toda la juventud por igual. La política hacia los jóvenes parte de considerar que los que habían pasado por la experiencia del Cordobazo y demás luchas previas a 1973, los que habían vivido con algún grado de participación el proceso de los años 73, 74 y 75, los estudiantes universitarios y los jóvenes obreros, eran en su mayoría irrecuperables y en consecuencia había que combatirlos. Para ello utilizaron un pretexto tan obvio como falaz: se trataba de subversivos reales o potenciales que ponían en riesgo al conjunto del cuerpo social. El ser joven pasa a ser un peligro.

Al mismo tiempo, y pensando en el largo plazo, se empieza a desarrollar una estrategia que va más allá de la eliminación del "enemigo". Se empieza a poner la mira sobre el relevo. Ahí están los estudiantes secundarios. Al momento del golpe tienen entre 13 y 18 años más de un millón de jóvenes.

EL TERROR EN LAS AULAS

Uno de los aspectos más dramáticos de la represión vivida en aquellos años fue el secuestro de adolescentes. Llegaron a 250 los desaparecidos que tenían entre 13 y 18 años, claro que no todos estudiaban. Muchos se habían visto obligados a abandonar la escuela para incorporarse al mundo del trabajo.

Pero de los procedimientos utilizados surge claramente que no se trataba de hechos aislados, sino de una investigación pormenorizada en distintas escuelas. En una entrevista concedida a un grupo de padres, un Coronel de Campo de Mayo les expresó que se llevaban a los jóvenes que habían estudiado "en colegios subversivos para cambiarles las ideas".

El 16 de septiembre de 1976, 10 estudiantes secundarios de la Escuela Normal Nro 3 de la Plata, son secuestrados tras participar en una campaña por el boleto estudiantil. Todos tenían entre 14 y 17 años. El operativo fue realizado por el Batallón 601 del servicio de Inteligencia del ejercito y la Policía de la Provincia de Buenos Aires, dirigida en ese entonces por el general Ramón Camps, que califico al suceso como "accionar subversivo en las Escuelas". Este hecho es recordado como "La noche de los lápices".

Solo tres de ellos aparecieron un tiempo después. Pablo Díaz, uno de los liberados, declaró en el juicio a las ex juntas: "Yo pertenecía a la Coordinadora de Estudiantes Secundarios de la Plata y con los chicos del colegio fuimos a presentar una nota al ministerio de Obras Públicas".

Levantaron chicos en algunos colegios que tenían "marcados" y enemigo era todo aquel estudiante que se preocupara por los problemas sociales, por fomentar entre los estudiantes la participación y la defensa de los derechos de los mismos.

HOY LOS LAPICES SIGUEN ESCRIBIENDO.

Hoy los estudiantes secundarios están recuperando aquella tradición de lucha y defensa por los derechos a una educación al servicio del pueblo y con mayor presupuesto.

Hoy los secundarios, sector dinámico de nuestra sociedad, tienen un doble desafío, que es la de reconstruir la memoria de lucha de nuestro pueblo y la de reorganizarse para enfrentar eL calamitoso estado de nuestra educación, ya que ellos son los más perjudicados.

Bibliografia consultada: Estudiantes secundarios: Sociedad y política, Berguier, Hechker y Schifrin.
Comunicadores Solidarios - Agencia Latina de Información Alternativa, 16/09/2005

Fuente



La Noche De Los Lápices (PDF)
María Seoane - Héctor Ruiz Nuñez









Titulo: La Noche De Los Lapices (1986)
Genero: Drama
Idioma: Castellano
Tamaño: 203-203-142 mb
Formato: RMVB.
Calidad de imagen y audio: VHSRip (Muy Buena)



 
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