Sobre Giordano Bruno

"Mucho he luchado. Creí que podía conquistar...
Y, ambos, el destino y la naturaleza, reprimieron mi celo y mi
fuerza. Aún el haberse atrevido es algo, ya que veo que el ser
capaz de conquistar está en manos del destino. sin embargo, había en mí
todo lo que yo era capaz de hacer; eso que ningún siglo futuro
podría negarme; eso que un vencedor podría tener como suyo:
no haber temido a la muerte, no haber cedido ante nadie que tuviese
igual firmeza de carácter y haber preferido una muerte valiente
a una vida sin lucha."
Giordano Bruno - "De Monade"

Una de las ilusiones de nuestra época es que el disconforme está en ascenso, que el hereje es el héroe y el revolucionario el nuevo redentor.

Tarde o temprano, un hombre tiene que encontrar una razón para vivir o morir. Puede ser una razón errada, pero el derecho del hombre a mantenerla es inalienable.

[...]Por lo menos, la posición marxista es clara. Desvíate y serás condenado: a la expulsion del partido, a una subsistencia menesterosa, al limbo de la no-existencia, al confinamiento brutal, a la muerte sin honor. El método democrático es más sutil, pero casi tan efectivo. La autoridad fiscal puede inmiscuirse en tus transacciones más privadas. A falta de prueba en contrario, supondrá lo que no pueda probar. Sin tu consentimiento, un patrón puede inquirir, archivar y transmitir los detalles más íntimos de tu vida privada y tu negativa a comunicárselos puede hacerle presumir delitos escondidos. El espía social, el que escucha conversaciones telefónicas, el revendedor de artefactos para violar la soledad, se ha convertido en arquetipo de nuestra sociedad. El desarrollo de los grandes monopolios en las comunicaciones ha empujado a los que protestan a las calles, donde sus reclamaciones pueden ser facilmente interpretadas o manejadas como desorden público. Se ha desarrollado toda una industria en torno del arte de la afirmación, pero la dignidad de disentir se ve diariamente denigrada. El que duda cae en desgracia, porque exige tiempo para reflexionar antes de entregarse a un acto de fe, y la libertad más difícil de conservar es la de equivocarse.

Pero la amenaza para el inconforme no es sólo externa. Es también interna. Se vierten tantas informaciones y opiniones divergentes en sus ojos y oídos, que el esfuerzo de racionalizarlas amenaza a veces su propia salud mental.[...]

Prefacio de "El Hereje" - Morris West

"No es a la muerte a lo que temo.
Ya he sufrido una docena de muertes
mientras esperaba la tortura y el interrogatorio.
El terror que me persigue es muy distinto:
!ver y conocer en este último calvario
la malicia final del ingenio del hombre!"
Giordano Bruno